EL PASADO 2 DE JULIO EL PARTIDO REGIONALISTA DE CANTABRIA CELEBRÓ SU XIII FIESTA
Revilla asegura que conseguirá poner a Cantabria «a la cabeza de España»
El PRC celebró en Castro Urdiales su multitudinaria fiesta anual. El líder regionalista reitera que hay que dar una oportunidad a la paz
I.AROZAMENA/CASTRO URDIALES
"Cantabria va muy bien y va a ir mucho mejor», aseguró ayer el presidente regional y secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, en la multitudinaria fiesta anual del partido celebrada en Castro Urdiales.
Ante miles de militantes y simpatizantes, Revilla afirmó que dos de los tres sueños que tenía hace 30 años se han cumplido y el tercero está a punto. Los dos primeros son recuperar el término de Cantabria para la comunidad autónoma y que los regionalistas llegaran al Gobierno. El tercer sueño es «poner a Cantabria a la cabeza de España».
La comunidad está «mucho mejor» que hace tres años, aseguró, y como ejemplo citó algunos datos económicos. En 2003, 218.000 personas cotizaban a la Seguridad Social y actualmente son 246.500. Estaban en el paro 25.500 cántabros y actualmente 19.000. Además de más desarrollo, Revilla resaltó que Cantabria ha ganado en «estabilidad» con la presencia del PRC en el Gobierno regional, tanto cuando pactó con el PP como con el PSOE. Eso demuestra, dijo, que «cuando el PRC hace pactos los hace no por intereses personales, sino por Cantabria».
No se han cumplido, dijo, lo que querían «los agoreros» del Partido Popular cuando en su toma de posesión aventuraron un «panorama caótico» para la región «y que en Cantabria se iba a hacer de noche».
A las mismas personas que le critican, les advirtió que seguirá promocionando Cantabria en todos los programas de televisión que le inviten. «En septiembre iré a muchos más», subrayó, ya que sirven para que la gente conozca más la región y prueba de ello es, indicó, los autógrafos que le piden cuando pasea por la Gran Vía de Madrid.
Sobre los proyectos en marcha, indicó que «están encauzados». Hoy, lunes, se inaugurará el tramo Pesquera-Reinosa de la autovía de la Meseta, acto en el que «voy a mojar el ojo, porque me he vuelto muy llorón». Una obra que, recordó, se agilizó gracias al «papel firmado» que exigió de Álvarez Cascos para pactar con el PP en la anterior legislatura. Un documento que «guardo como oro en paño» y que fijaba para 2005 la conclusión de la obra. Aunque se ha demorado algo, por la magnitud de los trabajos, recalcó que está a punto de concluir.
Ahora hay que abordar la Autovía Dos Mares que en este mismo mes tiene que salir a licitación la orden de estudio, afirmó.
De lo ya realizado, apuntó actuaciones «que estaban ahí» pero que se han potenciado como la promoción del Año Jubilar Lebaniego por donde ya han pasado 160.000 personas «y llegaremos al millón» y la cueva de El Soplao con 350.000 visitantes.
El objetivo de la acción de Gobierno es transmitir al resto de España y del mundo que «Cantabria es una buena tierra para venir a vernos, para invertir y para quedarse». Confirmó la visita del presidente de México, Vicente Fox, el próximo día 18 para recibir la Medalla de Oro de Cantabria.
También aludió a las buenas relaciones que mantiene con el Gobierno central y concretamente con su presidente José Luis Rodríguez Zapatero. Apuntó que «aunque me llamen pelota, si sigue soltando la gallina, viva Zapatero».
De la oposición criticó la forma «obtusa que tiene de ver las cosas», como cuando el PP censuró que se promocionara Liébana en botellas de cerveza.
Negociación con ETA
El presidente de Cantabria quiso terminar su discurso con una reflexión ante la posible negociación con ETA. Revilla recordó que, por su trayectoria, «no soy ambiguo» a la hora de condenar el terrorismo. Opinó que hay que dar «un margen de confianza» a Rodríguez Zapatero siempre que no haya concesiones políticas. «La paz no se puede cambiar ni por autodeterminación ni por perdón absoluto», concluyó.
El presidente regional reconoció que ve «muy difícil» el proceso que ahora se abre y le cuesta creer que vaya a salir bien, después de ver actitudes como la del etarra 'Txapote' en el juicio por el asesinato de Miguel Ángel Blanco. Apuntó que «la paz es lo único que añora España, es lo único que nos queda pendiente para ser plenamente europeos».